Las acostumbradas festividades han tenido lugar con motivo de la festividad del Día de los Héroes Difuntos, el Heldengedenktag. A las 11:00 de la mañana, el Führer ha dado un discurso ante los dignatarios del Tercer Reich reunidos en el Viejo Arsenal (Zeughaus) de la Unter den Linden en Berlín. Durante la retransmisión por radio del discurso, el pueblo alemán ha tenido ocasión de escuchar a su Führer alabar a los soldados alemanes por su “campaña victoriosa sin igual en el Este.”
El Führer durante el discurso en el Viejo Arsenal.
El contenido del discurso del Führer, que ha sido transmitido por radio a todos los hogares alemanes, ha sido el siguiente:
Es una hora solemne hoy en la que el pueblo alemán celebra su Día de los Héroes. Después de una campaña victoriosa y sin precedentes, verificada en el Este, los soldados de la Divisiones de nuestros Ejércitos de tierra, los tripulantes de nuestros barcos, los combatientes de nuestras fuerzas aéreas, se disponen a proteger al Reich contra nuestros antiguos enemigos del Occidente.
Por primera vez en nuestra historia, el pueblo alemán en su conjunto comparece ante el Todopoderoso y le ruega que bendiga su lucha por la existencia.
Con motivo de las celebraciones del Día de los Héroes, el Führer pasa revista a un Batallón de Honor de la Wehrmacht. Detrás del Führer desde la derecha, el Generaloberst Keitel, el Generaloberst von Brauchitsch, el Großadmiral Raeder y el Generalfeldmarschall Göring. Detrás del Generaloberst Keitel el General de Infantería Reinhardt.
La unidad alemana es inquebrantable.
Hoy celebramos este día del recuerdo dedicado a nuestros héroes, con el sentimiento de haber adquirido una nueva dignidad interior. Lo que ellos juzgaron lo bastante elevado para exigir el sacrificio de la vida debe, en la hora actual, encontrarnos dispuestos a la misma acción. Pero hay una cosa que nos eleva ahora por encima del pasado. Todos nosotros tenemos conciencia clara del ideal por que luchamos y por el que tantas personas luchaban inconscientemente en el pasado. Este ideal es el pueblo alemán.
El Führer saluda y da las gracias a heridos de guerra, representantes de los héroes homenajeados en el día de hoy. Yo tenía un camarada, entre todos el mejor...
Profesión de fe en la victoria.
Hace cinco años que proclamamos el servicio militar obligatorio y general. Durante casi quince años, el Nacionalsocialismo ha trabajado duramente para salvar a la nación alemana de su trágica desesperación. Mediante un trabajo único en la Historia, el nacionalsocialismo ha levantado de nuevo la conciencia de la nación, ha arrojado de su seno a los viejos espíritus de la capitulación derrotista y ha creado las bases generales y políticas para el rearme. Pero a pesar de todo esto, yo he estado durante años dispuesto a tender la mano al mundo para llegar a un acuerdo entre todos los pueblos. El mundo ha rechazado la idea de una reconciliación de los pueblos basada en la igualdad de los derechos de todos. Como Führer de la nación, como Canciller del Reich y como Comandante en Jefe del Ejército alemán me consagro para una sola misión: la de pensar día y noche en la victoria, 1a de combatir trabajar y luchar y, si es necesario, sacrificar mi propia vida, porque he reconocido que esta vez la suerte de Alemania quedará decidida para varios siglos.
Es lebe Adolf Hitler!
Mañana me toca a mí este día. Por cierto, revisé lo de Welles, y el ABC comete un error. Dice que el 7 llega a París y que al día siguiente se reunirá con Daladier. En el siguiente número, dice que el 8 sigue su visita con otras personalidades. Así que voy a modificar la entrada y pondré que el 7 es la entrevista con Daladier y los peces gordos.
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