Unas horas después del comienzo de la operación de represalia por el traicionero ataque polaco contra el Reich, se produjo un hecho insólito que quedará grabado en los anales de la historia militar junto con la carga de caballería ligera inglesa durante la guerra de Crimea.
A las 7 de la tarde del primero de septiembre, elementos de la brigada de caballería polaca Pomorska cargaron contra posiciones de la 20 División Motorizada de la Wehrmacht. Los infelices polacos arremetieron con sus sables y lanzas contra los vehículos blindados, que respondieron con fuego de cañón y ametralladora. La caballería enemiga fue aniquilada sin otro efecto que algunos arañazos sobre el blindaje de los panzer, que prosiguieron su avance inmutables.
Representación artística de la carga polaca.
Entre caballeros, la valentía siempre será una cualidad digna de admiración. No obstante, ante el sacrificio inútil de vidas el corazón del Führer, de los alemanes y de todos los hombres de bien se sobrecoge. Ignoramos si los mandos polacos alentaron a su caballería a un ataque suicida o si, desconocedores de la naturaleza metálica de las chapas de acero que cubren nuestros panzer, en verdad esperaban obtener la victoria. En cualquier caso, suplicamos a los polacos que no opongan más resistencia a lo inevitable y le ahorren nuevas desgracias a su pueblo deponiendo las armas. Alemania les garantiza su libertad y les tiende su mano de camarada.
Promoska Brigade, ruhe in Friede!
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